tiempo de escribir-tiempo de café
Ya se me pasó la locura que tenía el otro día.
Hoy no estoy enojada. Estoy un poco triste. Es que el cielo anda con ganas de oscurecerse, con ganas de llorar. Y eso se contagia...
Escucho a Jorge Drexler, su último álbum (Amar la Trama), y veo a gente que me hace pensar en cosas que ya pasaron. Es decir, me hace recordar a alguien que hace ya tiempo no veo ni siento, ni nada sé.
Subo el volumen de los parlantes, preparo el mate, me pongo cómoda. Tengo cosas que estudiar. Tengo mucho por hacer y además, estaba "románticamente" feliz. Venía bien, digamos. Venía muy bien desde ese aspecto de mi vida.
Para que se entienda: estaba emocionalmente bien. Feliz con tanto amor que me rodea(ba). Pero hoy, lo vi a través de otros ojos claros. Unos ojos amigos, que no sé qué piensan cuando me ven. Seguro que recuerdan cosas, momentos que pudieron haber sucedido. No sé. Han de pensar algo. Y resulta extraño creer que a través de las pupilas celestes de otra persona pueda llegar a ver el reflejo de otra mirada. Pero sí, sucede, es posible. Hoy lo sentí. Hoy sentí que una mirada puede ser ajena a uno mismo, cuando se llega a comprender el corazón de un amigo hermano. No sé si se comprende, tal vez sea mejor decir que cuando dos personas se conocen lo suficientemente, desde lo más íntimo, puede llegar a mirar las cosas desde la perspectiva del otro. Pero no se mira pensando lo mismo. Sólo se observa y se comprende. Es esa sensación, se entiende el por qué.
Para que se entienda: estaba emocionalmente bien. Feliz con tanto amor que me rodea(ba). Pero hoy, lo vi a través de otros ojos claros. Unos ojos amigos, que no sé qué piensan cuando me ven. Seguro que recuerdan cosas, momentos que pudieron haber sucedido. No sé. Han de pensar algo. Y resulta extraño creer que a través de las pupilas celestes de otra persona pueda llegar a ver el reflejo de otra mirada. Pero sí, sucede, es posible. Hoy lo sentí. Hoy sentí que una mirada puede ser ajena a uno mismo, cuando se llega a comprender el corazón de un amigo hermano. No sé si se comprende, tal vez sea mejor decir que cuando dos personas se conocen lo suficientemente, desde lo más íntimo, puede llegar a mirar las cosas desde la perspectiva del otro. Pero no se mira pensando lo mismo. Sólo se observa y se comprende. Es esa sensación, se entiende el por qué.
En definitiva, terminé diciendo todo eso sólo porque ver a uno de los amigos de esa persona, y al resto del grupo de amigos, estos tres días de facultad, se me subieron algunos recuerdos archivados por ahí, en el sótano del corazón y más allá, a la cabeza. Y la tarde gris me los devolvió sin previo aviso. Bah...con algunos síntomas. Hasta llegar a este punto, y volver a tener una recaída.
Según un amigo, es parte del proceso de cicatrización. Espero que sea así, y no como dice el título de esta entrada. Lo único que sí creo, es que el tiempo logró que todo llegue a doler menos. Un poco menos.
Gracias por todos los comentarios. Cuando tenga un tiempito libre, paso y comento. Saludos y abrazos a todos! :)
Comentarios
Por suerte todo se cura con tiempo...Hasta las heridas más hondas...Aunque sangren de vez en cuando...
Al fin y al cabo somos humanos...No te martirifiques por ello, es normal sentir dolor (Te entiendo mas de lo q pensas nena)
Mucha fuerza y adelante nomás!!
Abrazos ñ.ñ
un beso
Me encanta la cabecera de tu blog!!